miércoles, 7 de julio de 2010

Relajarse en la India

Para ser la cuna de tantas tecnicas de relajacion la India resulta un lugar tremendamente estresante. Otra de sus contradicciones. Aunque, en realidad, supongo que tiene sentido. ¿Para que querrian los cubanos el yoga? Pa' na'. Seria como enseñarle a nadar a una sardina. Sin embargo, los indios necesitan la meditacion, el yoga, los masajes ayurvedicos y toda la ayuda posible. Media hora en cualquier calle india y el estresometro se dispara. Y tambien tienen la siesta. La diferencia con la siesta patria es que los indios caen en el acto, donde les pille, en el medio de la calle, en el mostrador de su tienda, en el asiento del coche. Deambulando por el laberinto de callejuelas de Benares, donde me hallo ahora, me encuentro cuerpos de gente tirados por doquier, a las tres de la tarde, parece que hayan gaseado la ciudad. La siesta patria, se ha caracterizado siempre (bueno hasta ahora que estamos perdiendo las buenas costumbres) por su pompa y solemnidad. Una buena siesta precisa de cama, pijama y orinal. Y el abuelo anuncia que se va a echar la siesta con gesto grave, solemne. Hay un ritual detras (hay quien dice que se trata de cuestion de estilo). El indio cae fulminado, "¡ay, ay, que estres, que estres!", y al suelo.

Este amiguete si que esta relajado

En fin, que pillo lo de que en el subcontinente se hayan desarrollado todas estas tecnicas para sosegarse. Lo que no entiendo muy bien es que tantos extranjeros vengan aqui a encontrar la paz interior, relajarse, liberarse del estres y pintarse el karma de rosa. Estoy seguro que hay montones de fantasticos ashrams (centros espirituales) repartidos por toda la India, oasis tranquilidad, remansos de paz, lejos del mundanal ruido, donde encontrar sosiego para el alma, a base de mantras y asanas. Pero da igual. Por muy relajado y tranquilo que estes tras unas semanas de retiro espiritual, por muy cerca que estes del nirvana y la iluminacion, por mucho amor y loving kindness que destiles por todos los poros de tu piel hacia humanos, vacas, percebes y zanahorias y por mucho que los chakras se te hayan quedado como los chorros del oro, vas a tener que salir del ashram, aunque sea, unicamente. para ir al aeropuerto. Y en esas horas, media hora o cinco minutos de trayecto al aeropouerto todo se va a ir a tomar por culo. Cinco minutos de caos y confusion en cualquier calle india bajo un chaparron de decibelios y el asedio de una cacofonia de pitidos, gritos, musica a todo volumen, a la merced de la ley de la selva, que es el verdadero codigo de circulacion indio, rodeado por un amasijo de coches, motos, rickshaws, bicis, vacas y peatones, en medio de un torbellino de trastos y cuerpos pasando a centimetros unos de otros, a punto de tener 7 accidentes seguidos y con el corazon al borde de una taquicardia, mas la mugre y los olores. Esos cinco minutos se encargaran de que se te frunza el entrecejo, se te hinche la vena del cuello y te salga un tic en el ojo izquierdo que nunca habias tenido. Y a la mierda el loving kindness. Y empiezas a perder karma points hasta un nivel en el que tu proxima reencarnacion va a ser en forma de cucaracha, con suerte. Y el aura y los chakras se te ponen negros como el carbon. Y te montas en el avion de regreso a Eurolandia mas puteado de lo que habias venido. Asi que, si quereis relajaros, un masaje es mano de santo o un paseo por el monte o un porrito...

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