jueves, 25 de marzo de 2010

En Malawi

Me encuentro ahora mismo en Lilongwe, la capital de Malawi, uno de los paises mas pobres del mundo, con una renta per capita de 312$ (segun Wikipedia -?-) y una esperanza de vida de alrededor de 40 años, pero que cuenta con la poblacion mas amistosa que me he encontrado en mi vida.

Entre en el pais el pasado sabado, dia 20 de Marzo. Tras un viaje ininterrumpido de 36 horas, 24 de ellas en tren, 3 autobuses llenos hasta las encerretas, ser timado, 4 controles policiales, un paso fronterizo y un par de situaciones esperpenticas de las que dare debida cuenta en otro post, llegue a Mzuzu al norte de Malawi, a las 2 de la mañana, noche cerrada, hecho un guiñapo y totalmente exhausto.

A la mañana siguiente me dedico a pasear por la ciudad, resulta ser, por lo menos el centro, un lugar bastante agradable, con anchas avenidas y arboles en flor. Como por todas partes en Africa, las calles se encuentras abarrotadas de gente, yendo al mercado o a misa, ya que es domingo. La mayoria de la poblacion del pais es cristiana, con un porcentaje pequeño de musulmanes y grupos de rastafarians e hindues, y la gente es bastante religiosa. Al igual que en Tanzania te encuentras inscripciones por doquier informadote de que Dios te ama. La gente te saluda por la calle y cualquier interaccion con otra persona requiere saludarse, darse los buenos dias y preguntar que tal se esta. Incluso los caza turistas que quieren venderte algo son tremendamente educados y, normalmente, una amable negativa es suficiente para que te dejen en paz con una sonrisa.

Por la tarde cojo un autobus (otro) a Nkhata Bay, un pueblecito a orillas del lago Malawi. Me alojo en un hotelito de bungalows, con bonitas vistas sobre la bahia, a las afueras del pueblo. Doy un paseo hasta el pueblo, al que me cuesta llegar media hora, a pesar de que esta a 15 minutos, debido a que la mitad de los locales se paran a hablar conmigo. Afortunadamente no tengo ninguna prisa, y las conversaciones son agradables. Se me hace tarde navegando en internet y cae la noche. Por supuesto no hay ningun tipo de iluminacion, asi que pregunto a un lugareño por el hotel y, cuando me quiero dar cuenta (pense en un principio que nuestros caminos coincidian) me ha acompañado hasta la mitad de camino. Cuando le digo que no es necesario que me lleve al hotel y le doy las gracias, me responde con una sonrisa de oreja a oreja y una cara llena de satisfaccion por haberme ayudado (no, no me pidio ninguna propina, ni esperaba nada a cambio). Por el camino se nos une un borracho local, que no para de hablar, creo que trata de hablar en ingles, pero no le entiendo absolutamente nada. De hecho creo que ni siquiera es Chichewa, el idioma local, ya que el otro hombre no le entiende ni jota tampoco. Cuando le explico amablemente que quiero estar solo, me empieza a repetir lo que yo digo. Si paro el se para y si me doy la vuelta, empieza a protestar y a patalear ( y me sigue). Obviamente no entiende ni zorra de lo que le digo. Me empiezo a preguntar que coño hago yo en medio de la nada en plena noche con un tarado borracho siguiendome (y creo que ahora es cuando le tengo que dar las gracias a Coca por la linterna). Al mismo tiempo que rezo (Dios me ama) para que las señales indicadoras del hotel no desaparezcan, me dedico a decir cosas en español como "Soy un fistro pecador y estoy borrachooooor" que mi compañero, con mas intencion que acierto, se dedica a repetir a voz en grito. Afortunadamente el borracho se queda a la entrada del recinto del hotel, aparentemente muy cabreado (no se si se esperaba una propina) gritando "Soy un fistro...". Bufff, menos mal.

Al dia siguiente me doy un baño en el lago y me dedico a pasear por el pueblo. Incluso los obreros que estan trabajando en el hotel se paran a saludar, presentarse, darme la mano, preguntar de donde soy... No hurry in Africa. Para comer pruebo, por fin, la especialidad local, nsima, una masa hecha de maiz, una especie de porridge espeso, totalmente insipida. Mi happymetro baja enteros, se trata de comida puramente de subsistencia, una bomba de carbohidratos sin ningun valor gastronomico. A pesar de las caras sonrientes y de la despreocupacion que se respira por las calles, recuerdo abruptamente donde estoy. Como charlando con mis anfitriones en el "improvisado" restaurante: James "Brown" y Peter "Marley". El primero apodado Brown en el pueblo porque toca los bongos (?) y el segundo equipado con el kit completo de Bob Marley, canutillo incluido. Son muy majetes (y educados) y me hablan de la vida cotidiana en Malawi y de la corrupcion del pais.

(continuara)

4 comentarios:

  1. Hola Serge!

    Que bueno tio, me parto! Estoy celoso de tanta aventura! Me alegro que todo se pasa bien, y I can't wait de leer la seguida de las historias!

    Disfruta y cuidate mucho.

    P.S: Y las fotos?

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  2. hola Sergio, no conocia esa faceta tuya de escritor, parece que estoy leyendo a Perez Reverte, esta genial, ya tengo ganas de leer otra de tus historietas, por cierto luego puedes juntar todas las historias, y escribir un libro. Parece que lo pasas buen, no??, me alegro mucho. saludos desde León y tomaremos una limonada a tu salud. besos. cruz.

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  3. Perez Reverte?? Pero si no he escrito ni un jodido taco, y ademas, no estoy ni siquiera cabreado.
    Asi que es Semana Santa, vaya, vaya. Se agradece la limonada (mataria por una morcilla)
    :)

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  4. ves como al final si has dicho un taco, jejejeee, si quieres te mandamos al de la bicha....
    Cruz

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